Alguna vez durmió y en sus sueños estaba ella. Traviesa, sonriente, locuaz, enloquecida por el susurro del mar. Pero un cambio extraño la llevó a zafarse de esa vida apacible de lecturas, vino y mendrugos de pan. No se fue detrás de otro sino con ella misma, pero para mí fue un abandono. Empezó por borrárseles los recuerdos, los nombres y los rostros hasta que la magia terminó. Entonces para mí no tenía sentido apresurarse ni hacer planes para el verano. Perdónenme pero no es este un relato con final feliz, aunque lucho para que tampoco sea una historia para llorar. Simplemente les digo a quienes me preguntan que ella se diluyó en el silencio, se redujo a nada y dejó de respirar. Por eso, cada mañana, cuando extiendo el brazo y naufrago en el lado vacío de la cama, antes de ingresar a mis ocupaciones me siento aquí a contemplar y con la ayuda de un verso de Paul Eluard le digo “te busco más allá de la espera… más allá de mí mismo… y no sé cuál de los dos se halla ausente.
- Autor: Omar Pineda @omapin
- Fotografía: “Una mirada al mar” de Daniel Fermín @daniel_fermin
- «Viaje al Silencio«, microrrelato ganador del 1er. lugar en el concurso de microrrelatos inspirados en las imágenes de la exposición itinerante del III Concurso de Fotografía de Verano de la Asociación de Periodistas Venezolanos en España – Venezuelan Press
